Banderas son empresas responsables de definir las reglas de negocio para compras realizadas con tarjeta de crédito. Son ellas que definen los patrones por los que los adquirentes deben procesar las transacciones realizadas por ese medio de pago (cada bandera tiene sus propias reglas).
Las banderas mantienen una relación cercana con los adquirentes para garantizar la aceptación de sus tarjetas de crédito en los establecimientos. Así, ellas promueven su uso y amplían la base de usuarios.
En el flujo de pago por tarjeta de crédito, la bandera recibe del adquirente la información de la compra realizada en su tienda. Entonces, valida las condiciones (como el número de parcelas) y envía los datos al banco emisor, que comprueba si el comprador tiene límite disponible.